Preguntas

Cuando uno camina por la calle, los extraños suelen preguntar cosas como la hora o dónde queda la calle Paysandú.
En los últimos días me han hecho preguntas un poco más complejas.
La primera pregunta me la hizo una anciana que buscaba a su bisnieta. La señora buscaba, de noche, una escuela en la que su bisnieta estudiaba música.
Cuando le indiqué la dirección hacia la escuela más cercana, tras agradecerme, se fue empujando su carrito de supermercado vacío.
Se fue y me di cuenta, tarde, de que, en realidad, esta mujer me estaba preguntando si habría, para sus descendientes, para los hijos de los desposeídos de hoy, educación.
La otra pregunta me la hizo un tipo de mi edad, año más, año menos:
"¿Dónde hay volquetes?"
Estaba buscando esos contenedores que se usan para separar residuos.
Le dije que en el barrio -el bajo Flores -no se presta ese servicio.
Algo contrariado, agradeció y se fue buscando una fisura en el mundo. Una grieta en la que encontrar su sustento.
Marcos Vicente